Desde el minuto uno de mi embarazo supe que jamás renunciaría a mis bikinis para ponerme uno de estos trajes de
baños “ideales” para las felices premamá.
Lo siento, pero no puedo con esto, y del lazo... que me decis?? |
Quizás porque todo lo que había visto hasta entonces era todo de este
pelo, me horripilaba la idea de
enfundarme en uno de esos terribles bañadores.
A mi madre le espantaba la idea de ir luciendo barriga por la playa o
la piscina, y yo, con mis hormonas revolucionadas y en pie de guerra a
cualquiera que osase a llevarme la contraria, me lo tome como un desafío en
toda regla, así que lo primero que hice al llegar el verano fue sacar del
armario mis bikinis del verano anterior y lucirlos como si la barriga no
existiera, es más, me compré un bikini de “no embarazada” y pasé el verano tan
feliz, ganando la batalla, una vez más a la desfasada y poco favorecedora ropa
premamá.
A toro pasado y con las hormonas en calma he visto que no es tan terrible la cosa y que hay marcas como kiabi
o asos ofrecen unos diseños bastante
aceptables y a precios razonables, teniendo en cuenta que estas prendas
solo las usaremos unas pocas veces...
On line también existen multitud de páginas, en concreto en ésta
me ha llamado la atención que las partes de abajo de los bikinis son especiales
para mayor comodidad de la barriguita…
Debo reconocer que taparse un poco la barriga no está mal, no por
nada, sino porque el pleno sol directamente en el bombo puede llegar a molestar
un poco, no hay que olvidarse que la piel en el embarazo es muy sensible al
sol, y sobre todo si eres de las que tienden a marcarse la línea alba se recomienda
evitar la exposición directa a los rayos solares especialmente en esa zona.